23 de enero de 2016

Pablo Iglesias confiesa que es fan de Gran Hermano


Pese a las cáusticas declaraciones de Pablo Iglesias el pasado año en las que aseguraba que el programa de televisión Gran Hermano le parecía deleznable, el secretario general de Podemos ha sorprendido a propios y extraños con sus nuevas confesiones. En ellas, no sólo asegura sin titubeos que no le disgusta el reality show, sino que además se declara fan incondicional de dicho espacio televisivo.

Gran Hermano me parece una absoluta maravilla, no me pierdo ninguna gala e incluso veo los resúmenes repetidos en internet, para seguir al tanto de todo lo que se cuece en la casa, confesaba el líder de Podemos. Preguntado por las declaraciones anteriores en las que criticaba ferozmente el reality show más longevo de España, Iglesias salía airoso de esta forma: Yo no he criticado en ningún momento a Gran Hermano, lo único que me molestó fue que se expulsara a los concursantes de la casa sin alternativa habitacional. Sólo eso.

A nivel más personal, el secretario general de Podemos confesó al equipo de investigación de La poca razón que en algún momento se había planteado hacer el cásting para entrar en la casa: Hace un par de años quise participar en Gran Hermano con Íñigo Errejón, pero en Telecinco me dijeron que no era posible, porque no aceptan a menores de edad en la casa, comentó el polémico político visiblemente indignado. Tanto me indigné con la dirección del programa que pensé en crear un partido político llamado Concursemos, pero voces malintencionadas afirmaron que estaba subvencionado por Nicolás Maduro y desestimé la idea, añadió Iglesias.

La entrevista al que fuera eurodiputado entre 2014 y 2015 finalizó con varias preguntas que dejaron entrever el futuro del líder de Podemos y la posibilidad de entrar a concursar en la casa en el futuro. En relación a ello, afirmó: Yo entraré encantado, siempre y cuando me nombren vicepresidente del confesionario. Además, no me gusta que Mercedes Milá hable con los concursantes a través de un plasma porque me recuerda a Rajoy. Para concluir, sentenció: Gran Hermano es una alegoría de la situación política actual, porque da igual si eres el que más conflictos creas dentro de la casa, que al final la gente te acabará votando.